Un miura de nombre Islero acabó hace 60 años con la vida del que, para muchos, es considerado como uno de los toreros más grandes de todos los tiempos. Aquel 28 de agosto de 1947, el coso de Linares vio como el morlaco apagaba de una cornada el aliento de Manuel Laureano Rodríguez Sánchez «Manolete».
Sesenta años después, y a las puertas del estreno mundial de una película sobre aspectos de su vida desde el plató de Hollywood, el Consorcio Local de Turismo prepara ruta turística que llevará a los visitantes a recorrer los rincones del califa del toreo en su ciudad. Esta iniciativa, presentada de soslayo en Fitur, e incluida en la agenda cultural municipal, se pondrá en marcha la próxima primavera, según informó a ABC el gerente del Consorcio, Federico Rodríguez. «Hemos querido que la presentación de esta ruta coincida, además de con el 90 aniversario del nacimiento del torero (4 de julio de 1917) y el 60 de su muerte, así como con la película sobre su vida», dirigida por Menno Meyjes e interpretada por el actor Adrien Brody y la galardonada actriz española Penélope Cruz.
Los foráneos que deseen adentrarse en el pasado de Manolete visitarán la casa en la que creció, en la barriada de Santa Marina; la finca Lobatón, en la que dio sus primeros capotazos, e incluso la taberna en la que solía degustar los caldos de su tierra. Además, la ruta también pasa por los dos monumentos escultóricos que la ciudad tiene de su Cuarto Califa: un busto en la Plaza de la Lagunilla, y un conjunto en la Plaza del Conde de Priego, mirando a la iglesia de Santa Marina, iglesia donde se han casado toreros como Finito de Córdoba. Web con la ruta Rodríguez informó, además, de que junto a las visitas guiadas, se creará una página web sobre la ruta, «para que las personas interesadas puedan conocer los lugares que la conforman», aseguró. Aún quedan algunos flecos por definir del proyecto, que se enmarca en el Plan de Actuación del Consorcio de Turismo de Córdoba, «y detalles que, por el momento, nos vamos a reservar hasta que el proyecto se ponga en marcha. Estamos convencidos de que tendrá una gran acogida, tanto por los cordobeses, como por los visitantes que lleguen a la ciudad».
Los amantes del toreo y de la historia de Córdoba podrán recordar a esta figura, el diestro más representativo de su época. Un artista con una concepción de la fiesta muy en consonancia con la sensibilidad del aficionado de entonces. Su manera de entender la lidia es digna de destacar en la historia de la tauromaquia. Manolete siguió una evolución inversa a la que experimenta la mayoría de los diestros, que comienzan apuntandos sus condiciones de toreros, para acabar dominando la muerte suprema. El Cuarto Califa logró dominar este arte desde casi el comienzo de su carrera.